domingo, 9 de diciembre de 2018

Mesias revolucionario


            A lo largo de varias semanas he proporcionado algunas reflexiones sobre los libros de Génesis y Éxodo. Esto inició porque tuve como propósito iniciar una lectura de la biblia desde el principio hasta el final, pasando por todos los libros. En este primer esfuerzo he podido apreciar más claramente la diferencia que existe entre estos dos libros.   
            El primer libro básicamente está centrado en historias relacionadas con la familia y el Dios que esta ahí; Adán y Eva, Abraham y Sara, el pleito entre los hermanos Jacob y Esaú, la relación entre los hijos de Jacob y José, y concluye con la muerte del patriarca Jacob. El libro del Éxodo tiene un enfoque mucho mas comunitario; la libertad de un pueblo, su profeta –Moisés- sus leyes, sus normas, su sacerdocio, su liturgia y su relación con Dios.
            Después de libro del Éxodo hasta los Evangelios y el Nuevo Testamento, me atrevo a decir que todo se desarrolla en el ámbito social; el pueblo escogido de Dios, sus profetas y el mesías. Comúnmente distinguimos el libro de Apocalipsis como algo distinto a todo lo demás –ahora lo aprecio similar al resto de los libros por tener la misma característica; pueblo escogido y el mensaje del profeta en turno-.
            Con Génesis sucede algo sumamente distinto, se enfoca mucho en los conflictos familiares de los personajes, con seres que no tienen una identidad nacional sino mantienen una identidad familiar; los hijos de Adán, los hijos de Noé, los hijos de Abraham, los hijos de Jacob.  
            Si uno pudiese leer la Biblia del final al principio, ósea, desde la salvación de la humanidad y su gran redención por el sacrificio del cordero –descrito en apocalipsis- pasando por las cartas Apostólicas, Paulinas, los Evangelios, Profetas, Sapienciales, destapando todas las liturgias antiguas del Viejo Testamento, llegaríamos hasta el libro del Génesis, el punto neurálgico del conflicto entre la humanidad y su rebeldía contra Dios, encontrando un libro donde la mayoría de sus relatos se centran en conflictos familiares tan cotidianos como los que suceden en nuestras casas; hermanos que pecan por envidia, hombres que engañan a sus mujeres, hijos que engañan a sus padres, etc. ¿Este fue el origen de la perdición del género humano?, me parece que así es, la Escritura parte describiendo conflictos entre personas que son familia para después describir conflictos entre personas que representan naciones y pueblos.  
            Como católicos constantemente decimos “los judíos esperaban un mesías que los liberase de la opresión Romana”, y es que en ocasiones, nosotros también somos como esos judíos que quisiéramos ver a una Iglesia proselitista involucrada en una revolución social y política que genere un cambio en la Nación, llegando a subestimar la propia labor pastoral de nuestros sacerdotes porque no actúan de este modo “libertario”, como ese “mesías líder” que siguen esperando los judíos. Queremos cambiar el árbol desde arriba, no desde abajo, removiendo la tierra para llegar a la raíz; la familia.
            Para finalizar, la propuesta de Dios para salvar al mundo inicia desde la familia, el propone La Sagrada Familia; Jesús, María y José. Miremos este estandarte que Dios ha mostrado para que sea la base que transforme el mundo con su gracia.