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lunes, 10 de diciembre de 2012

Dignidad


El documental “La última cima” es una semblanza de la vida de Pablo Domínguez Prieto, un joven sacerdote diocesano fallecido en un accidente el alpinismo. En la cinta, varios amigos recuerdan al sacerdote, mas, existen dos frases que me gustaron muchísimo, haciendo una paráfrasis, la frase dicha por un joven cuando le preguntaron; “¿Qué piensas tu de los hombres que no tienen esposa?”, “bueno, la vida no consiste solo en tener…”, y la otra; “Pablo miraba con dignidad a cualquier persona sin importar su condición moral, a muchos pordioseros les hizo recobrar su dignidad con el trato…”. Domínguez murió a la edad de 43 años. 

La dignidad humana es uno de los valores cristianos más importantes, esta persigue los derechos fundamentales y la igualdad de todos los individuos. El ser humano solo por el hecho de existir debe ser respetado.

Si analizamos a Jesucristo, puedo decir que Cristo se despoja de su dignidad para otorgarla a todos los pueblos. En la antigua creencia judía el fruto de una vida justa era morir en la vejez rodeado de descendientes, esto era como una “recompensa” de Dios, sin embargo, Jesús muere de una forma totalmente contradictoria a esta creencia. Bajo la óptica del judaísmo de la época, Jesús fue visto como blasfemo y condenado entre los delincuentes. El muere joven, sin descendencia, en un castigo a vergonzante. Tenemos que considerar que el Verbo de Dios se despojo de su gloria al encarnarse y hacerse semejante a nosotros y siendo como nosotros, se despojo de aquello que los hombres tomaban como digno: vivir, que en el caso judío fue alcanzar la vejez y fallecer rodeado de descendientes.

Tras su pasión, muerte y resurrección, el Señor abre las puertas de la evangelización a todas las naciones, decía San Pablo; “no hay acepción de personas para Dios…” ó como paráfrasis “de todos los pueblos, Dios ha derribado las barreras deseando hacer uno solo, la Iglesia…”. El apóstol lo dice porque en las antiguas creencias había diferencias dogmáticas sobre la condición humana, los reyes y emperadores eran seres divinos, entre los pueblos antiguos había distinciones atribuidas a la superioridad de una raza sobre la otra. Fue el cristianismo por medio de los sacramentos quien introduce la idea “hermandad” entre los hombres; “todos somos hermanos por el Espíritu que habita entre nosotros…”. La evangelización se expande por toda la tierra sin excluir a ningún pueblo, aunque, los apóstoles, los discípulos y muchos hermanos en algunos pueblos si han sido rechazados, torturados ó asesinados, perdiendo su dignidad con tal de llevar el anuncio a otros, asemejándose en ello a  Jesús.   
   
Despojémonos de nosotros mismos, de nuestro renombre ó nuestro ego, el trato digno es una caridad suprema porque me recuerda que soy igual que tú. “Pablo miraba con dignidad a cualquier persona…”. 

miércoles, 5 de diciembre de 2012

La sucesión y el sacerdocio


Estas últimas semanas he estado escribiendo sobre la exposición que di en la clase de apologética católica “defensa de la fe” que imparte Lourdes Reynoso en la casa diocesana. En dicha ocasión colabore para definir la relación que existe entre el antiguo testamento y el nuevo, afirmando que; el antiguo testamento es la sobra de la nueva alianza traída por Jesucristo tras su resurrección. Esta es la tercera parte de una serie de artículos.
En el primer artículo mencione dos versículos del antiguo testamento relacionados con la confesión de pecados y el sacerdocio Judío. Los versículos fueron; Levítico 16:21 para la confesión comunitaria donde se imponía las manos sobre la victima para que en esta recayeran los pecados del pueblo, y la confesión del pecado individual al sacerdote en Levítico 5:5,6. Tras la resurrección de Jesús, los apóstoles enseñaron que todas estas celebraciones del antiguo testamento son prefigura de aquello que estaba por venir con Cristo.
La segunda parte escribí sobre el significado del “memorial”. Para nosotros puede resultar fácil interpretar la palabra “memorial” porque la definimos bajo nuestro contexto: “algo que se hace en memoria de una persona”, pero, en el tiempo de los apóstoles, los discípulos entendieron otra cosa, pues, el “memorial” estaba relacionado con las victimas y las ofrendas presentadas por el sacerdocio judío en su templo para tributar a Dios. Levítico 5,12:“La llevará al sacerdote judío, el cual tomará un puñado como memorial, y lo hará arder sobre el altar junto con las ofrendas que se queman para el Señor: es un sacrificio por el pecado”.
Hoy escribiré sobre la sucesión, esto significa la persona que ocupa el puesto de alguien ó sucede a otra. Como bien sabemos, la Iglesia Católica tiene una lista de sucesores del apóstol San Pedro, pero, la sucesión es algo que desde antes del cristianismo ya se practicaba, se respetaba y se creía. Dentro del sacerdocio Judío la sucesión sacerdotal era importante, a diferencia de los profetas que en algunos casos tuvieron discípulos que los sucedieron y en otros casos no. El sacerdocio Judío de la antigua alianza le fue entregado a Israel para ser ejercido solo bajo una tribu hebrea: Levi. Como ejemplos de sucesión sacerdotal tenemos el caso de Eleazar, sucesor de Aarón. De esto cito: “Allí le quitarás a Aarón sus vestiduras y se las pondrás a su hijo Eleazar, puesto que Aarón irá a reunirse con sus padres, allí morirá”, “Moisés le quitó sus vestiduras a Aarón y se las puso a Eleazar. Luego murió Aarón en la cumbre del monte y Moisés bajó del monte con Eleazar”. (Números 20, 26,28), “Moisés y el sacerdote Eleazar les hablaron en las estepas de Moab, cerca del Jordán, a la altura de Jericó…” (Núm. 26,3). Dentro de la nueva alianza encontramos el antecedente de sucesión apostólica en el caso de Judas Iscariote, en el libro de los Hechos los apóstoles reunidos solicitan al Espíritu un sucesor de Judas, siendo Matías el escogido para ser contado dentro del grupo de los doce apóstoles (Hechos 1,26).
Teniendo el antecedente hebreo, la Iglesia unida a la promesa de San Pedro respeta la sucesión porque otorga el beneficio de perpetuar la interpretación desde Cristo a los apóstoles y de ellos a nosotros. Recordemos que desde la antigüedad saber leer y escribir era un privilegio para pocos. La sucesión conlleva la responsabilidad de educar. Meditar las Sagradas Escrituras en lo individual es importante y confirmar lo que entendimos de ello con los sacerdotes es también motivo de alegría.  








jueves, 29 de noviembre de 2012

El memorial y el sacerdocio


La semana pasada mencione la invitación que recibí para exponer en la clase de apologética católica “defensa de la fe” que imparte la maestra Lourdes Reynoso en la casa diocesana. Fui invitado para complementar el tema de la relación entre el antiguo testamento y el nuevo, confirmando que, el antiguo testamento es la sobra de la realidad que vendría en la nueva alianza en el cumplimiento de la resurrección de Jesucristo.
En el primer artículo mencione dos versículos del antiguo testamento relacionados con la confesión de pecados dentro de las liturgias celebradas por el sacerdocio Judío establecido en la tribu de Levi, al que se le conoce como “sacerdocio levítico”. Los versículos fueron; Levítico 16:21 para la confesión comunitaria donde se imponía las manos sobre la victima para que en esta recayeran los pecados del pueblo, y la confesión del pecado individual al sacerdote en Levítico 5:5,6. Siendo Jesús el cordero, tras su resurrección los apóstoles enseñaron que todas estas celebraciones del antiguo testamento son prefigura de aquello que estaba por venir con Cristo. 
Hoy haré mención al “memorial” que nos hace recordar la cena que Jesús compartió con sus discípulos cuando instituyo la Eucaristía.
Para nosotros puede resultar fácil interpretar la palabra “memorial” porque la definimos bajo nuestro contexto, siendo algo que se hace en memoria de una persona, una actividad que nos recuerda algo, pero, en el contexto de Jerusalén en el siglo I, los discípulos de Jesús entendieron otra cosa, pues, el “memorial” está relacionado con las victimas y las ofrendas presentadas por el sacerdocio judío en su templo para tributar a Dios. Así lo leemos en el Levítico 2,1-3: “Cuando alguna persona ofreciere oblación a Dios, su ofrenda será flor de harina, sobre la cual echará aceite, y pondrá sobre ella incienso, y la traerá a los sacerdotes, hijos de Aarón; y de ello tomará el sacerdote su puño lleno de la flor de harina y del aceite, con todo el incienso, y lo hará arder sobre el altar para memorial; ofrenda encendida es, de olor grato a Dios. Y lo que resta de la ofrenda será del sumo sacerdote Aarón…”.  También en Números 10,10: “En las grandes ocasiones, en las fiestas y en los días de luna nueva, tocarán las trompetas sobre sus holocaustos y sus sacrificios de comunión; y este será para ustedes un memorial delante de su Dios. Yo soy el Señor, su Dios” ó Levítico 5,12:“La llevará al sacerdote, el cual tomará un puñado como memorial, y lo hará arder sobre el altar junto con las ofrendas que se queman para el Señor: es un sacrificio por el pecado”. Estos antecedentes son importantes porque nos ayudan a entender más acertadamente el contexto en el cual la Eucaristía fue instituida. El Cuerpo y la Sangre de Cristo no son un símbolo expresado en el Pan y el Vino, no, el apóstol San Pablo viniendo de un antecedente fariseo comprende la importancia de la Eucaristía como memorial del sacrificio de redención. De esto escribe en la carta a los corintios que: quien come y bebe indignamente ó estando en pecado, come y bebe para edificar su propia condena (1era de corintios 11,27), porque en el antiguo testamento ningún judío debía celebrar la pascua hebrea sin estar purificado de sus faltas (Números 9,1-14).
Estas actividades del antiguo testamento nos confirman la fe católica donde Jesús convierte el símbolo antiguo en realidad presente para perfeccionar a su Iglesia.



miércoles, 28 de noviembre de 2012

La confesión y el sacerdocio


La semana pasada me invitaron a dar una exposición en la clase de apologética “en defensa de la fe” que imparte la maestra Lourdes Reynoso. Semanas antes a la exposición comentaba con la maestra que deseaba exponer sobre las prefiguras del antiguo testamento, porque, en muchas de ellas encontramos lo que la Iglesia es.
La prefigura es el texto del antiguo testamento que delinea la figura de algo mostrándolo anticipadamente. La antigua alianza está repleta de prefiguras que anuncian a Cristo, por ejemplo, el ofrecimiento que hace Abraham a Dios en el sacrificio de Isaac y aunque Isaac no muere, el concepto es “el Padre que entrega a su hijo para el sacrificio…”. Una correlación de eventos es “la torre de babel” donde Dios confunde el lenguaje humano porque estos intentan alcanzar el cielo con la obra de sus manos, mientras que, en pentecostés por medio del Espíritu Santo los discípulos hablan otras lenguas y proclaman el evangelio. Pentecostés resuelve el conflicto de Babel, la torre es el símbolo del esfuerzo humano por alcanzar el cielo mientras que la Iglesia nace desde el cielo y busca a los hombres. Existen muchos otros ejemplos que relacionan el antiguo testamento con el nuevo.
En aquella exposición comente a los alumnos; “quise hablar de prefiguras, pero es demasiado, así que solo hablare del sacerdocio de los judíos como prefigura del sacerdocio de la nueva alianza…”. En la carta a los hebreos se menciona que las liturgias judías eran solamente “la sombra de las cosas sobre naturales…”. En este sentido, las celebraciones religiosas de los judíos eran en si una prefigura de nuestro culto, no olvidemos que la Eucaristía fue instituida por Jesús en la celebración judía de “la cena pascual”, también, “Pentecostés” tiene un antecedente hebreo, los diez mandamientos, las doce tribus de Israel y los doce apóstoles de Cristo, correlacionan las dos alianzas.    
Se le llama “sacerdocio levítico” al ejercido por los israelitas en la antigua alianza, se llama así por que se estableció sobre la tribu de Levi. Los sacerdotes oficiaban en el tabernáculo de Moisés disponiendo las ofrendas y las victimas a sacrificar para borrar el pecado del pueblo. Es interesante la similitud entre las dos alianzas sobretodo “la confesión y el sacerdocio” en el antiguo testamento, cito; “Cuando pecare en alguna de estas cosas, confesará aquello en que pecó, y para su expiación traerá a Dios por su pecado que cometió, una hembra de los rebaños, una cordera o una cabra como ofrenda de expiación; y el sacerdote le hará expiación por su pecado” (Levítico 5:5,6). Otro texto interesante es el de la confesión comunitaria, el sacerdote imponía sus manos sobre el animal llevando este todas las transgresiones del pueblo; “Aarón impondrá sus dos manos sobre la cabeza del animal y confesará sobre él todas las iniquidades y transgresiones de los israelitas, cualesquiera sean los pecados que hayan cometido, cargándolas sobre la cabeza del chivo. Entonces lo enviará al desierto por medio de un hombre designado para ello” (Levítico 16:21).

Hay armonía entre las dos alianzas, recordemos a Juan el bautista y su afirmación sobre Jesús; “este es el cordero que quita el pecado del mundo…”, sus palabras tenían relación con la liturgia del templo hebreo. Hoy, Jesús es cordero y cabeza de los sacerdotes, ha llevado a la plenitud todo, disponiéndose el mismo como ofrenda en el pan y el vino, dando poder a sus discípulos para completar la expiación del pecado; “A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados…” (San Juan 20:23).  




martes, 20 de noviembre de 2012

El pan, la fe y la vida


Los católicos elevan un pan en cada reunión y dicen que es el cuerpo de su salvador, su creencia afirma que para poder salvarse es necesario compartir el pan con los necesitados ejerciendo la caridad, desde ese sentido no es descabellado elevar el pan como signo de salvación, pues, si no comparten el pan entre ellos según su fe no se salvan. Ellos creen en la evangelización, esto es, ir por todo el mundo anunciando las buenas nuevas, por ese lado, no veo maldad alguna porque tiene sentido según su fe: cuando ellos evangelizan y emprenden misiones en realidad están buscando compartir el pan que los salva con otros que están lejos, en resumidas cuentas su fe es un acto de caridad por compartir lo más grande que tienen que es el alimento.

Ellos elevan el pan y dicen que en él hay vida, en eso tienen razón porque la vida depende de los alimentos, cualquiera que viva sin comer morirá. Cualquier sociedad debería elevar el pan como celebración a la vida. Las tribus prehispánicas afirmaban que el hombre fue formado del maíz y toda su economía estaba basada en el maíz, para el indígena sin alimento no había desarrollo solo restaba morir. Esta percepción antigua tiene sabiduría y los católicos aun la profesan; “sin el pan no hay vida”.

El alimento debe ser un derecho y una obligación social porque comer es la oportunidad para seguir viviendo, la humanidad encontrara salvación si comparte el pan, que es el alimento. Estas alabanzas que hacen los católicos más bien es un reconocimiento ó reconciliación con todo, es una síntesis de toda la creación, pues, para producir el pan que es el alimento, la tierra produce los frutos, el cielo se ocupa de las lluvias y el hombre de maquilarlo, así que, “tierra, cielo y hombre” se dan a la tarea de producir el pan. Es imposible producir el pan si no participan los tres en conjunto, en esto existe un mensaje curioso; el pan no surge del egoísmo, sino que es necesario la cooperación del cielo, la tierra y el hombre. El pan que nos da vida por lo tanto no ha surgido del egoísmo. No podemos exentar a la tierra de su función, como tampoco lo podemos hacer con las lluvias ni podríamos vivir solo de agua, el hombre tampoco pude estar exentó porque un pan que no alimenta a nadie no tiene sentido ni razón de ser.
El hombre no puede manipular las lluvias, no ha podido predecir el inicio ó el termino de las sequías ó las inundaciones, en esto, la vida humana depende del cielo. El hombre y la tierra agradecen la lluvia, pero, el hombre debe ser paciente con ambos, pues, la tierra también ocupa descansó para poder producir.  
Elevar el pan es dejar atrás los actos de soberbia humana contra la creación, un pan producido es la oportunidad para seguir viviendo. Elevar el pan significa también un acto de agradecimiento, la humanidad entra en comunión con la creación al reconocerle su labor y con los hombres al compartirlo. El pan nos salva porque es vida y cuando lo compartimos permitimos que otros por el pan vivan.   





martes, 13 de noviembre de 2012

Dios es amor


San Pablo y otros Apóstoles se reunían los sábados en las sinagogas judías según la costumbre de los judíos para anunciarles el cumplimiento de las Escrituras en Jesús. Esto levantaba discusión y pleito en las sinagogas. Entre los paganos también sucedía algo similar, los Apóstoles aprovechaban los momentos oportunos ó lugares públicos para exponer la resurrección de Jesucristo. Conocido es el discurso de San Pablo en Atenas donde hace uso de un “hito” nombrado por los griegos como “el dios desconocido”, porque los griegos tenían tantas deidades que dieron lugar a la posibilidad de que tal vez exista un dios al cual no conocen. San Pablo encuentra en ese “dios desconocido” la oportunidad de hablarles de Jesús. Los griegos escucharon el anuncio, pero, en el momento en que San Pablo menciona que Jesús fue crucificado, muerto y resucitado, empiezan a burlarse de él y lo corren. Los griegos no concebían a un Dios que se mostró a los hombres como “débil”, fue asesinado por los mismos y resucito. La deidad en ese entonces eran símbolo de poderío y no se asociaba al martirio, ni la debilidad.
Los apóstoles anunciaban el evangelio con libertad, incluso, desde el anuncio del reino de los cielos que es antes de la resurrección y se dio dentro de Jerusalén, los discípulos ya conocían que: si anuncias y eres recibido la paz ha llegado a aquella casa, pero si no, continua tú camino y limpia el polvo de tus pies. Después de la resurrección de Jesús, la evangelización solicita el anuncio a todos los pueblos. Los apóstoles anunciaban de ciudad en ciudad, pero, también se limpiaban “el polvo de sus zapatos”. Así sucedió en el areópago con San Pablo y los griegos, estos lo corrieron, el apóstol partió del lugar, solo un puñado de griegos le creyó y partieron junto con él. En la carta a los Tesalonicenses se menciona como San Pablo en esa comunidad no tuvo necesidad de anunciar algo porque Cristo ya había sido anunciado. La carta a los Romanos afirma que se abstuvieron de anunciar a Jesús porque ya había sido anunciado y prefirieron partir a la búsqueda de lugares donde el evangelio no hubiese sido anunciado. Se comprende que en el tiempo de los Apóstoles el mundo estaba conformado de otra manera, el politeísmo, la filosofía y vida de los pueblos paganos, anunciar a Jesucristo en realidad era una novedad.



Nuestro mundo ha heredado estas prácticas apostólicas. No podemos negar que cualquier secta religiosa que use la biblia como libro inspirado también se dará a la tarea de anunciar e insistir bajo su interpretación. En algunos puntos concordaremos y en otros no. La Iglesia Católica desde su origen ha tenido la tarea de anunciar a Jesús iniciando con los Apóstoles bajo distintos contextos históricos. Por un lado, podríamos sentarnos a discutir punto por punto con cualquier sectario, ateo, incrédulo, apostata, gnóstico, ó de cualquier otro credo cumpliendo así la tarea de “anunciar”, aunque Jesús ya es conocido en occidente. Benedicto XVI afirma que el creyente debe saber cuándo hablar pero también cuando callar. La madre Teresa de Calcuta afirmaba que “hay que evangelizar sin las palabras”, pero “callar” parece contradictorio a la petición de “anunciar”. Recordemos que Dios es amor y en ocasiones el hombre debe callar para que el amor que habita en el hable, porque Dios es amor.      


martes, 6 de noviembre de 2012

"dioses sois"


“Yo y el Padre somos uno”. Los judíos trajeron otra vez piedras para apedrearle. Jesús les dijo: “Muchas obras buenas que vienen del Padre os he mostrado. ¿Por cuál de esas obras queréis apedrearme?” Le respondieron los judíos: “No queremos apedrearte por ninguna obra buena, sino por una blasfemia y porque tú, siendo hombre, te haces a ti mismo Dios”. Jesús les respondió: “¿No está escrito en vuestra Ley: Yo he dicho: dioses sois?”      Si llama dioses a aquellos a quienes se dirigió la Palabra de Dios - y no puede fallar la Escritura – a aquel a quien el Padre ha santificado y enviado al mundo, ¿cómo le decís que blasfema por haber dicho: "Yo soy Hijo de Dios"? (San Juan 10:30-36).

Este dicho “dioses sois” es motivo de confusión para muchos. Conozco protestantes que están divididos a causa de este versículo porque unos argumentan que los seres humanos no somos dioses y otros afirman que sí, estando eternamente divididos por sus equivocadas interpretaciones.

Sin duda sabemos que el intento humano de igualarse a Dios es un pecado, desde ese ángulo creer que “somos dioses” es un error que desata nuestra enemistad contra Dios, que es en realidad un odio al prójimo. ¿A que se referirá Cristo cuando dice “dioses sois”?. Jesús ha citado a los fariseos el Salmo 82, del cual cito un fragmento;  Yo había dicho: “¡Vosotros, dioses sois, todos vosotros, hijos del Altísimo!”. Mas ahora, como el hombre moriréis, como uno solo caeréis, príncipes. ¡Álzate, oh Dios, juzga a la tierra, pues tú eres el señor de todas las naciones!. El Salmo anuncia desde la nueva alianza lo que está por suceder en la nueva alianza, pues, nosotros tras nuestro bautismo nos reconocemos como hijos de Dios y ciertamente como afirma el salmo: “como hombres moriremos”.

Benedicto XVI hacer una reflexión sobre el verso “dioses sois” refiriéndose a que por medio de la Eucaristía es Cristo mismo quien se encarna en nuestro ser, somos uno con el Señor, en lo físico y en el Espíritu. “dioses sois” no por nuestros méritos sino por estar unidos a Jesús, porque Jesús compartió su divinidad con nosotros. Por Cristo accedemos a la trinidad. Para el judío la Tora es el Verbo de Dios, para nosotros, la Eucaristía es la encarnación del Verbo. La cercanía con Dios bajo la nueva alianza es hacerse uno con Dios por Jesús.  


  
Este regalo tan grande que es la divinidad que hemos recibido lleva consigo la responsabilidad de ejercer tal obligación. “dioses sois” al modo de Cristo, dado que el pecado es querer ser dioses para despojar a Dios, recibir su culto y ejercer su dominio sobre el prójimo. “dioses sois” para encarnar y tomar el papel de Cristo en este mundo, para que por medio de la obediencia podamos acceder a la resurrección. Ciertamente “dioses somos” aunque como hombres moriremos, pero, si es que hicimos uso cabal de tal honor resucitaremos porque Dios al llamarnos hijos suyos también nos ha dado derecho a tal facultad. “dioses sois” gracias a Cristo.      

  


  

miércoles, 31 de octubre de 2012

creyentes contra paganos


En la Iglesia de Corinto se dio una discusión referente a las comidas ofrecidas por los pueblos paganos a sus ídolos. Por un lado, los nuevos evangelizados sentían dudas por venir del paganismo y vivir la fe cristiana sin ningún antecedente, a diferencia de los judíos creyentes de Cristo que tenían más noción de los mandamientos por la primera alianza en las enseñanzas de Moisés. Esto trajo consigo división dado que en lo general los hombres que tienen más noción de las cosas se encumbran por su conocimiento sobre otros, en este caso, los judíos creyentes por su bagaje monoteísta se sentían con algo de jerarquía y “más obedientes” que los paganos evangelizados que eran vistos como “menos obedientes” por su ignorancia e impedimento por tener que purificar su percepción de las cosas tras su percepción politeísta del mundo.

Sobre la discusión de las comidas en un mundo pagano y la libertad del creyente, el Apóstol concluye lo siguiente en el siglo primero; “Todo está permitido, pero no todo me conviene. Todo está permitido, pero no todo me hace bien. Que cada uno piense no en sí sino en los demás. Coman, pues, todo lo que se vende en el mercado sin plantearse problemas de conciencia, pues del Señor es la tierra y todo lo que contiene. Si alguien que no comparte la fe los invita, vayan, si quieren, y coman de todo lo que les sirvan sin plantearse problemas de conciencia. Pero si alguien les dice: Esa es carne sacrificada a los ídolos, no coman. Piensen en el que les advirtió y respeten su conciencia” (1era de Corintios 10:23-28).

Para los israelitas comer de las víctimas es entrar en comunión con su altar. En la Misa, la copa de bendición que bendecimos es comunión con la sangre de Cristo, y el pan que partimos es comunión con el cuerpo de Cristo, y por esto, toda la Iglesia formamos un solo cuerpo, porque el pan es uno y todos participamos del mismo pan a lo largo de los siglos.

La cultura moderna lleva consigo un pasado pagano. Cuando miramos los templos griegos, mayas, egipcios, nos admiramos de su colosal arquitectura, no las rechazamos por el uso que se le dio. Nuestro país tiene un pasado pagano por el mundo prehispánico, la palabra “México” es por la tribu “mexicas”, incluso, el tamal era la masa que portaba las viseras de los hombres asesinados en honor a las deidades prehispánicas. Cuándo nos reunimos a comer tamales ninguno de nosotros piensa tributar honores a una deidad y derramar sangre inocente. Fue la acción misionera la que llevo el evangelio al mundo politeísta que se regía sin piedad y sin conciencia.



Pienso que como creyentes debemos recuperar ese anheló misionero y confiar en que por medio del evangelio podemos purificar la vida moderna que nos rodea, las costumbres, los hábitos, etc. No vivamos haciendo una prohibición del mundo moderno como hacen algunas sectas sintiéndose obedientes, sino más bien, que sea el evangelio quien nos indique como hacer uso correcto de aquello que nos rodea, pues, todo está permitido y si no nos conviene estudiemos nuestra fe para saber que es conveniente y que no.      




   

miércoles, 24 de octubre de 2012

Un camello por el ojo de una aguja



Una vez que el fariseo Saulo de Tarso se convierte al evangelio de Jesucristo y cambia su nombre a Pablo será en uno de los personajes más importantes de la Iglesia en el siglo primero, conocido por nosotros como San Pablo. Este apóstol describe en la carta a los gálatas la sorpresa de los cristianos al verlo anunciar a Jesucristo; “El que antes nos perseguía ahora anuncia la buena nueva de la fe que entonces quería destruir…”. San Pablo antes de su conversión fue un fariseo defensor del Judaísmo, un fanático enemigo de los cristianos, que encarcelaba, que enjuiciaba, que consentía y promovía la muerte de todo aquel que anunciara a Cristo. Entre los primeros cristianos la conversión del fariseo era un signo del poder de Dios, incluso, algunos creyentes dudaban de San Pablo pues no concebían la conversión del fariseo asesino de creyentes. He querido poner el caso de esta conversión porque es sin duda un milagro de Dios, de algo que para los hombres era inimaginable, imposible, un caso perdido, pero recordemos que para Dios todo es posible.  “Un camello si puede entrar por el ojo de una aguja” siempre y cuando Dios transforme al camello. 



Recordemos la plática entre el joven rico y Jesús; En esto se le acercó uno y le dijo: “Maestro, ¿qué he de hacer de bueno para conseguir vida eterna?” Él le dijo: “¿Por qué me preguntas acerca de lo bueno? Uno solo es el Bueno. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos”. “¿Cuáles?” le dice él. Y Jesús dijo: “No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre, y amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Dijo el joven: “Todo eso lo he guardado; ¿qué más me falta?” Jesús le dijo: “Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos; luego ven, y sígueme”. Al oír estas palabras, el joven se marchó entristecido, porque tenía muchos bienes. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: “Yo os aseguro que un rico difícilmente entrará en el Reino de los Cielos. Os lo repito, es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el Reino de los Cielos”. Al oír esto, los discípulos, llenos de asombro, decían: “Entonces, ¿quién se podrá salvar?” Jesús, mirándolos fijamente, dijo: “Para los hombres eso es imposible, mas para Dios todo es posible” (San Mateo 19:16-26).
Muchos interpretan este verso como si fuese algo exclusivo para las personas que tienen muchas posesiones, pero, también afirmo que hay quienes tienen pocas posesiones y estas también les son de impedimento para seguir a Jesús. Si revisamos el texto nos daremos cuenta que el joven rico en realidad era un justo porque confiesa haber guardado los mandamientos, aunque para llevar una vida consagrada que es algo extraordinario si es necesario renunciar a todo sin importar el estrato social, solo imaginemos lo difícil que es para nosotros renunciar a los planes futuros que ni siquiera son tangibles. El impedimento puede ser material ó intangible. Los discípulos preguntan: Entonces, ¿Quién se podrá salvar? porque la frase del camello y la aguja es perturbadora, aunque más bien parece una analogía que retrata el esfuerzo del hombre por entrar al reino de los cielos por sus meritos sin la asistencia de Dios, es imposible, es un esfuerzo inútil.    
Para concluir, creo que Dios no va cambiar las dimensiones de la puerta del reino, mas bien va transformar aquellos que deseen entrar para que entren. No te frustres queriendo hacer entrar a un camello por el ojo de una aguja, sigue anunciando y pídele a Dios que haga el milagro.   



miércoles, 17 de octubre de 2012

El hablar en lenguas


Desde hace tiempo he tenido ganas de escribir sobre el carisma de lenguas descrito por el Apóstol San Pablo en la carta a los Corintios, aclaro que este es diferente al don “poliglota” que los Apóstoles recibieron en el libro de los Hechos donde los extranjeros escucharon a los discípulos hablar en distintos dialectos gracias al Espíritu Santo. El carisma de lenguas descrito por San Pablo en la carta mencionada se refiere a quienes hablan misterios por el Espíritu ó “lenguaje celestial” por llamarlo de algún modo.

San Pablo menciona que las reuniones en Corinto se convirtieron en un desorden, se perdió el centro del culto pues hicieron de la cena Eucarística un banquete, una comida cualquiera, pues, en Corinto nadie meditaba si era digno ó no de comer el pan, a lo que el Apóstol añade; “quien sea indigno y coma será enjuiciado”. Según la narrativa de San Pablo pareciera que en las reuniones en Corinto muchos hablaban en lenguas, pero, lo hacían interrumpiéndose los unos a los otros, sin una comunión, haciendo una paráfrasis de las recomendaciones de San Pablo este añade; “quien habla en lenguas por el Espíritu habla misterios, si no hay un intérprete entre ustedes mejor oren en silencio, si un incrédulo llega a ustedes y le hablan en lenguas ¿qué provecho podrá sacar si no entiende nada?, más bien dirá que ustedes están locos”. San Pablo también menciona sobre Corinto que era una comunidad con muchas divisiones a pesar de tener en ella estas manifestaciones vivas del Espíritu, de ahí vendrá su tratado sobre el amor que haciendo una traducción más fiel es la caridad; “si yo regalo todos mis bienes y no tengo caridad nada soy, si conozco todos los misterios, hablo en lenguas angélicas y no tengo caridad nada soy”. Comprendo que era la Iglesia naciente que se enfrentaba al reto de definir su enseñanza religiosa sumada la tarea de evangelizar y catequizar a los paganos que no tenían referencias de nada. En la actualidad, he conocido varia gente que tiene este carisma, incluso, en distintas religiones (supongo que se da por lo dicho por Cristo “a quien toca se le abrirá, quien pida recibirá”), pero, jamás conocí a alguien que tuviese el carisma de interpretación de lenguas y de ahí concluí que quizá no hay quien intérprete porque la Iglesia ya lo ha dicho todo, la teología es clara, la revelación esta completa, a mi ver ya no hay mucho que añadir solo nos resta estudiar lo que la Iglesia ha construido.   

La semana pasada visite a unos familiares al sur de Sonora, cuando una de mis tías me vio lo primero que me dijo fue; “¡una de tus tías fue a un encuentro de renovación carismática y recibió el carisma de interpretación de lenguas!”, “¡muy bien!” exclame y comente que jamás había conocido a alguien que lo tuviese. Mi tía con su carisma apareció y me comento que en la reunión había otra persona que tenía el mismo talento e interpretaron lo mismo, “¡muy bien!” volví a exclamar pues eso lo entona más con el modo de Jesús; “un testimonio es verdadero a razón de dos ó más testigos” (debemos reconocer que hay muchos charlatanes, no debemos ser ingenuos sino prudentes). Ansioso le pregunte; “¿y que interpretaron?”, ella contesto; “el mensaje fue una alabanza sencilla a Dios: te alabamos, te alabamos”, “bien” conteste porque a mis adentros pensaba: “la revelación ya está completa”.       

miércoles, 10 de octubre de 2012

La biblia y el feminismo


El feminismo es un movimiento social que promueve la igualdad de derechos entre la mujer y el hombre. En la sociedad actual es común encontrar posturas feministas oponiéndose a la Iglesia como si la religión se opusiera a los derechos del género humano. A mi ver existe un error de apreciación por desconocimiento.

Como ejemplo análogo, es preciso citar que por lo menos en Norteamérica antes de la Guerra de secesión (1861), los primeros movimientos feministas surgieron teniendo como argumento las Sagradas Escrituras en un contexto protestante. Las feministas cuestionaban la idea de la supremacía del varón blanco pues la lectura de las Escrituras era solo para los hombres blancos, prohibida para los negros y las mujeres, que desde el púlpito protestante se predicaba el amor al prójimo pero en lo social se aprobaba la esclavitud de negros y se negaba a las mujeres el derecho a votar. Las feministas norteamericanas abogaron por defender los derechos de los negros persiguiendo también los suyos bajo la igualdad que manifiesta el versículo: “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó” (Génesis 1:27). Es esencial entender que una de las principales premisas de las Sagradas Escrituras es la dignidad humana, siendo el Espíritu quien inspira a cada autor para plasmar las enseñanzas teniendo en su contexto inmediato sociedades que interpretan bajo su óptica y que a lo largo de los siglos van profundizando en las enseñanzas dadas por los autores sagrados para mejorar la vida en las comunidades. Si el contexto social es “machista” ó “racista” no por eso el fundamento del cristianismo lo es, porque, “en el principio Dios creó al género humano, varón y hembra los creo”. La esencia del mensaje es que ante Dios somos iguales todos en dignidad.      



En el libro de los proverbios se hace la descripción de la “mujer ideal”; Una mujer de carácter, ¿dónde hallarla? Es mucho más preciosa que una perla. Sabe su esposo que de ella puede fiarse: con ella saldrá siempre ganando. Le reporta felicidad, sin altibajos, durante todos los días de su vida.    Ella se ha conseguido lana y lino porque trabaja con manos hacendosas. Como los barcos de los comerciantes, hace que su pan venga de lejos. Se levanta cuando aún es de noche para dar de comer a los de su casa. ¿Tiene idea de un campo? Ya lo compró: una viña que pagó con su trabajo.            Se pone con ardor a trabajar porque tiene en sus brazos el vigor. Vio que sus negocios iban bien, su lámpara no se apagó toda la noche: sus manos se ocupaban en la rueca, al huso sus dedos daban vuelta. Le tendió la mano al pobre, la abrió para el indigente. No le hace temer la nieve por los suyos porque todos tienen abrigos forrados. Para ella se hizo cobertores, y lleva un vestido de lino y de púrpura. Su marido es conocido entre los oficiales, porque se sienta entre los ancianos del país. Vende telas que ha teñido, hasta el comerciante le compra un cinturón. Va irradiando salud y dignidad, mira con optimismo el porvenir. Lo que dice es siempre muy juicioso, tiene el arte de transmitir la piedad.  Atenta a las actividades de su mundo, no es de aquellas que comen sin trabajo. Sus hijos quisieron felicitarla, su marido es el primero en alabarla: "¡Las mujeres valientes son incontables, pero tú a todas has superado!" ¡El encanto es engañoso, la belleza pasa pronto, lo admirable en una dama es la sabiduría! Reconózcanle el trabajo de sus manos: un público homenaje merecen sus obras" (Proverbios 31:10-31). Esta lectura de proverbios describe un perfil de mujer que no necesita ser sustentada por su marido por ser emprendedora y auto suficiente  su mayor atributo aparte de ser fiel a Dios es que en su autonomía financiera decide estar unida a su esposo y este le reconoce y se alegra de sus triunfos. El derecho de la mujer no es impedimento para acercarse a Dios.

jueves, 4 de octubre de 2012

Dios es todo poderoso


En una de las clases del Padre Homero García referentes al catecismo de la Iglesia se hablo del tema “Dios todo poderoso”. Los seres humanos entendemos “poder” como el dominio, la facultad ó la fuerza que uno ejerce para mandar o ejecutar alguna acción según la voluntad. Cuando afirmamos “todo poderoso” comprendemos que es el dominio absoluto de todo. Sé que muchos no entienden ó no creen esto de “Dios todo poderoso” porque quisiéramos que Dios ejerciera esa “fuerza”, ese “mando” ó “dominio” sobre todas las cosas para mejorar la vida de los hombres. Podemos sentirnos decepcionados si solo esperamos magnificencias de Dios.

Los Apóstoles dijeron a Cristo; “Señor, ¿Por qué no hacemos bajar fuego del cielo para que estos hombres duros de corazón perezcan?”, respondiéndoles el Señor; “no vine a perder las almas de los hombres sino a salvarlas”. El fuego es símbolo de purificación, este texto debe hacernos reflexionar sobre el día en que el Espíritu Santo descendió en pentecostés, soplo y se poso sobre los discípulos como “lenguas como de fuego”, obviamente el lenguaje es simbólico, pero, esta llegada del Espíritu Santo si destruyo la vida de aquellos hombres de corazón duro transformándolos por la conversión a una vida nueva. Aquella solicitud de los discípulos “hagamos descender fuego del cielo” se cumplió al modo de Dios y no al modo de los hombres. Bajo este antecedente, ¿cómo es que Dios hará visible su poder entre nosotros?, ¿esperaremos acaso una magia celeste que se lleve a los “malos” y deje con vida a los “buenos” en un arrebato de justicia celestial estableciendo la paz y la equidad en el mundo?, no, pues una fuerza así se parece más al modo en que los hombres desean que Dios actué, esperando que la justicia y la equidad sea ante los ojos de todos un milagro de Dios y no una responsabilidad del ser humano.

El poder de Dios está en su debilidad y nos fue mostrada en Jesucristo. Belén el poblado más insignificante de Israel, tan minúsculo y de mala fama que un apóstol expreso; “¿de Belén puede salir algo bueno?”, es recordado gracias a Jesús, un joven maestro de la fe, llevado a juicio, juzgado injustamente y muerto en una cruz, que en esa insignificancia por la resurrección trascendió mas allá de los imperios y los siglos. Los evangelistas hacen una descripción detallada de la crucifixión pero no de la resurrección, se describe el lamento del Verbo visto como un hombre débil aunque fuerte en la cruz encontrando la muerte, mientras que la majestuosidad del acto de la resurrección no es descrita como nosotros lo deseáramos llevándose a cabo en el silencio de un sepulcro sin testigos.

San Pablo afirmaba que “los más débil de Dios es más poderoso que lo más fuerte de los hombres”, el poderío de Dios no es un estruendo, ni una magia, es más bien ese milagro que el creador puede efectuar en los corazones duros de los hombres, en esos sepulcros blanqueados que por la conversión pasan de la muerte al despertar a una vida nueva, de un Dios que en su debilidad no es visto a los ojos de los hombres pero que bajo ese mismo poderío por la fe puede ser visto, avergonzando aquellos que antes lo vituperaban por no verlo y que ahora por la fe lo miran y lo aman. Dios está en medio de nosotros y es todo poderoso. 

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Las tres mujeres


En el lenguaje de las Sagradas Escrituras “la mujer” es símbolo de “pueblo”. Desde el protoevangelio en génesis 3:15 “la enemistad entre la serpiente y la mujer” se refiere a lucha entre el pueblo de la Alianza contra el mal. En el libro de Oseas se hace alusión al pueblo israelita como “una mujer” que debe ser fiel a Dios porque cayó en adulterio. La idolatría es considerada un adulterio hacia Dios porque lo sustituye por algo. La mayoría de los católicos asociamos apocalipsis 12 “la mujer vestida de sol con doce estrellas” con la Virgen María, pero, también es correcto decir que en ese capítulo la mujer representa a ese pueblo que dará luz al Mesías, “la mujer de las doce estrellas” es símbolo del pueblo de las doce tribus hebreas y del pueblo de los doce apóstoles de Cristo, siendo María la escogida. San Pablo y el capítulo final de Apocalipsis hacen alusión a la Iglesia como la esposa de Jesucristo, la Iglesia como pueblo sin nación, unida bajo los sacramentos es mostrada en las escrituras como una mujer.

Bajo este antecedente me parece interesante observar el verso de San Marcos 16:1 donde se hace mención a las tres mujeres: “María Magdalena, María la madre de Jacobo y Salome” que compraron especies aromáticas para ungir el cuerpo de Jesús llevándose la sorpresa que Cristo había resucitado de entre los muertos. Bajo una interpretación personal, encuentro una semejanza entre estas tres mujeres y los tres pueblos que esperan a Jesucristo, estos son; Judaísmo, Cristianismo e Islam. Por un lado, el Judaísmo negó a Jesús y lo sustituyo haciéndose idolatra como una mujer adultera; “¡Crucifícalo!” gritaban los Judíos a Pilato y “no tenemos más rey que Cesar”, los Judíos esperan un Mesías que ya vino y vendrá. El Islam espera el retorno de Jesús y los justos aunque lo llamen “profeta”. La Iglesia lo espera y lo proclama como “Rey, Profeta y Sacerdote”, segunda persona de la trinidad, la encarnación del Verbo de Dios. Es curioso esta similitud entre las tres mujeres y las tres religiones, considerando que María Magdalena fue adultera y fue la primera en encontrarse con Jesús resucitado y ¡si, el Judaísmo cometió adultero al asesinarlo y fue el primero en verlo resucitado tal cual!. 

El común denominador entre las tres mujeres y las tres religiones es “el Dios de Abraham” y en eso tenemos parentesco, pidamos a Dios por la tolerancia, pues, ni Mahoma se atrevió a condenar a los justos de otros credos, como lo escribió en la Sura 2: 62. “Los creyentes, los judíos, los cristianos, los sabios, quienes creen en Dios y en el último Día y obran bien, ésos tienen su recompensa junto a su Señor. No tienen que temer y no estarán tristes”. Por el lado Judío, el rabino Andre Cheoraqui bajo su interpretación espero que la Jerusalén actual se convirtiera en esa “nueva ciudad” promotora de la paz y la piedad, pues en ella convergen y nacen las tres religiones más importantes. Por nuestra parte basta añadir que siendo Jesús el Mesías: “todo lo que hagamos al prójimo se lo hacemos a Cristo”.   



Espero que Musulmanes, Judíos, Católicos, incluso protestantes concordemos que en la práctica de la piedad no hay error teológico. Como católicos vivamos la fe y estudiémosla sin fanatismos esperando dignamente el retorno de ese misterio que es Jesucristo, evangelizando al mundo con nuestros actos. ¡Paz a vosotros!. 

jueves, 20 de septiembre de 2012

Las protestas mas comunes contra Benedicto XVI


Cuando el Santo Padre visita algún lugar del mundo abundan protestas y acusaciones; “Nazi, las riquezas, los pederastas y el Estado laico…” son las banderas más populares. Bajo mi parecer creo que el prejuicio anti católico invade a muchos manifestantes cegándolos a la compleja realidad.

Sobre Ratzinger y su incursión cuando adolescente en las ligas juveniles del partido nacional socialista alemán podríamos escribir una columna completa, pero basta decir que ningún hombre podrá superar la convicción de un llamado a la paz mundial cuando este se hace de parte de un testigo de guerra. Ratzinger conoce el dolor de la guerra porque la vivió. Aun así, para quien desee acusarlo, alegrémonos de lo que es hoy; un converso que anuncia a Jesucristo, vocero de la paz.   

En el artículo: “Compartir también puede ser entretenido” citando Forbes mencione que el ingreso anual de los tres poderosos de Hollywood (Michael Bay, Oprah, Spielberg) supera por 120 millones de dólares el presupuesto anual del Vaticano. Incluso, el presupuesto de la Universidad de Arizona es 3.3 veces mayor, la UNAM lo supera 8.5 veces, la UNISON recibe casi la mitad, la Universidad de Málaga, España tiene un presupuesto 1.35 veces mayor. La arquidiócesis alemana y de  chicago manejan un presupuesto 2 veces mayor. Bajo las comparativas, el Vaticano no luce tan acaudalado como la mayoría cree, en realidad tiene un presupuesto limitado para ser una Institución de peso internacional considerando también el valor histórico y cultural de la Santa Sede.

La pederastia es una injusticia y una realidad desgarradora dentro de cualquier institución. Solicitarle “justicia” a Benedicto XVI puede ser algo noble, pero debe entenderse que es el Estado quien debe hacer valer la justicia y no el Vaticano. La manifestación y protesta debe hacerse frente a las instituciones mexicanas encargadas de impartir justicia. Según el IFAI, México ocupa el 2do lugar internacional en pornografía infantil, de cada 10 niños que usan internet 4 son contactados por pederastas, el problema va más allá de las asociaciones religiosas, hacer reproche solo a la Iglesia Católica puede convertirse en un deseo de desprestigio y hostigamiento, la realidad de México no se soluciona lapidando verbalmente a un grupo ó un credo.

En Latinoamérica el concepto de “Estado Laico” debe cuidarse. En nuestro País, Rogelio Zamora Barradas accedió a un puesto de elección popular siendo ministro religioso de una congregación no católica, violando así “La Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público”. En Honduras hay sectas constituidas como asociaciones civiles y bajo esos términos legales sus líderes participan como candidatos a puestos de elección popular. Los dirigentes del denominado “centro cristiano de salvación” presentaron en 2006 un proyecto de ley que pretendió convertir al Presidente Hugo Chávez en obispo mayor.   

Espero despertar la reflexión en los manifestantes que se oponen a la problemática que ya expuse, porque cuando las protestas son propositivas, conscientes de la realidad y sin dolo se persiguen un buen fin; llamar a los injustos a lo que es justo.