Sitios

sábado, 18 de agosto de 2012

Debates sobre la libertad de culto en México (1848 - 1865)


En estas vacaciones visite la ciudad de México y adquirí un libro sobre historia de México llamado; “De héroes y mitos” escrito por Enrique Krauze. Cuál fue mi sorpresa al encontrar que el autor hace un repaso por los periodos relacionados con el debate de “la libertad de culto en México”. De inicio, el contexto internacional fue el siguiente, la fórmula de “la libertad de culto” había sido empleada en Estados Unidos con gran éxito para atraer capitales extranjeros de inversionistas de distintos credos. Estados Unidos firmo su acta de independencia en 1776 y México en 1821, la tolerancia religiosa y el derecho de todos los civiles a practicar su culto era clave para atraer inversionistas de otras naciones. De tal suerte que, México intento emular el camino con el fin de atraer la inversión extranjera para el beneficio del México naciente.

De la obra de Krauze hago cita de las posturas “a favor” y “en contra” de los debates en prensa y el Congreso entre pensadores y políticos mexicanos (mencionando solo el nombre de algunos) en este periodo de la historia de nuestro país (1848 al 1865) para que nos miremos hoy como País y como Iglesia. Posturas en contra (recordemos, es 1848); “la tolerancia religiosa romperá la unidad religiosa de nuestro país…”, Observador Católico (1848); ”bajo el pretexto de tolerar a los hombres que no son de las mismas creencias se puede caer en el error de contaminar la verdad de nuestra fe”, “la tolerancia religiosa no debe ser una condición para que México atraiga inmigrantes”, Mariano Arizcorreta; “es verdad que la libertar de cultos atraerá inmigrantes, pero, habrá que esperar el tiempo en que los inmigrantes nacionalizados lo exijan”, De la Rosa; “un pueblo que abriga en su seno la división religiosa traira consigo la lógica de que sus ciudadanos desechen cualquier religión, dando argumentos al pueblo para ser indiferentes, incrédulos ó ateos, ¿Qué será de la moral?, ¿qué ley podría darse a la conciencia, que norma a los intereses, que freno a las pasiones?, Entonces el hombre entroniza el egoísmo en su corazón y se entrega por completo a los placeres materiales, la moral fluctuara al azar de los individuos”, “si se establece la tolerancia es de esperarse que algún día llegue a ser Presidente de la Republica el simpatizante de una secta”, “La tolerancia llevara a la persecución de la Iglesia Católica” (sucedió en 1926), “La tolerancia permitirá la propagación de errores y supersticiones en el pueblo mexicano”. Menciono los argumentos a favor; José María Mata; “la tolerancia es un principio ético, filosófico, democrático de civilización”, dice Francisco Zarco; “la tolerancia ya es practicada por la Iglesia, en el estado Vaticano existe el respeto y la libertad para los demás cultos, si el Vicario de Cristo permite en su estado que los hombres practiquen la religión que deseen sin duda es porque no encuentra un ataque a la religión verdadera”, “la unidad religiosa no se ha de sostener legalmente, la unidad religiosa impuesta por la ley seria un absurdo”, “La prosperidad de Estados Unidos no existiría sin la libertad religiosa”, Ignacio Ramírez; “la libertad religiosa es un principio del evangelio, el pueblo no se opone a la tolerancia porque sabe que Cristo fue tolerante”.

A más de 150 años de distancia algunas posturas ¡parecen actuales!. Que la tolerancia no sea el argumento para dejar la moral al azar ó demeritar las verdades de nuestra fe, que el credo de otros no provoque en nosotros un temor manifestado en odio.