martes, 20 de noviembre de 2012

El pan, la fe y la vida


Los católicos elevan un pan en cada reunión y dicen que es el cuerpo de su salvador, su creencia afirma que para poder salvarse es necesario compartir el pan con los necesitados ejerciendo la caridad, desde ese sentido no es descabellado elevar el pan como signo de salvación, pues, si no comparten el pan entre ellos según su fe no se salvan. Ellos creen en la evangelización, esto es, ir por todo el mundo anunciando las buenas nuevas, por ese lado, no veo maldad alguna porque tiene sentido según su fe: cuando ellos evangelizan y emprenden misiones en realidad están buscando compartir el pan que los salva con otros que están lejos, en resumidas cuentas su fe es un acto de caridad por compartir lo más grande que tienen que es el alimento.

Ellos elevan el pan y dicen que en él hay vida, en eso tienen razón porque la vida depende de los alimentos, cualquiera que viva sin comer morirá. Cualquier sociedad debería elevar el pan como celebración a la vida. Las tribus prehispánicas afirmaban que el hombre fue formado del maíz y toda su economía estaba basada en el maíz, para el indígena sin alimento no había desarrollo solo restaba morir. Esta percepción antigua tiene sabiduría y los católicos aun la profesan; “sin el pan no hay vida”.

El alimento debe ser un derecho y una obligación social porque comer es la oportunidad para seguir viviendo, la humanidad encontrara salvación si comparte el pan, que es el alimento. Estas alabanzas que hacen los católicos más bien es un reconocimiento ó reconciliación con todo, es una síntesis de toda la creación, pues, para producir el pan que es el alimento, la tierra produce los frutos, el cielo se ocupa de las lluvias y el hombre de maquilarlo, así que, “tierra, cielo y hombre” se dan a la tarea de producir el pan. Es imposible producir el pan si no participan los tres en conjunto, en esto existe un mensaje curioso; el pan no surge del egoísmo, sino que es necesario la cooperación del cielo, la tierra y el hombre. El pan que nos da vida por lo tanto no ha surgido del egoísmo. No podemos exentar a la tierra de su función, como tampoco lo podemos hacer con las lluvias ni podríamos vivir solo de agua, el hombre tampoco pude estar exentó porque un pan que no alimenta a nadie no tiene sentido ni razón de ser.
El hombre no puede manipular las lluvias, no ha podido predecir el inicio ó el termino de las sequías ó las inundaciones, en esto, la vida humana depende del cielo. El hombre y la tierra agradecen la lluvia, pero, el hombre debe ser paciente con ambos, pues, la tierra también ocupa descansó para poder producir.  
Elevar el pan es dejar atrás los actos de soberbia humana contra la creación, un pan producido es la oportunidad para seguir viviendo. Elevar el pan significa también un acto de agradecimiento, la humanidad entra en comunión con la creación al reconocerle su labor y con los hombres al compartirlo. El pan nos salva porque es vida y cuando lo compartimos permitimos que otros por el pan vivan.